Biblioteca selecta de literatura española, o, Modelos de elocuencia y poesia, tomados de los escritores mas célebres por P. Mendibil y M. Silvela, Volumen1

Portada
Pablo de Mendíbil
1819
 

Páginas seleccionadas

Otras ediciones - Ver todas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 129 - No había la fraude, el engaño ni la malicia mezcládose con la verdad y llaneza. La justicia se estaba en sus propios términos, sin que la osasen turbar ni ofender los del favor y los del interese, que tanto ahora la menoscaban, turban y persiguen.
Página 128 - Entonces sí que andaban las simples y hermosas zagalejas de valle en valle y de otero en otero, en trenza y en cabello, sin más vestidos de aquellos que eran menester para cubrir honestamente lo que la honestidad quiere y ha querido siempre que se cubra...
Página 309 - ... no será muy difícil hacerle creer que una labradora, la primera que me topare por aquí, es la señora Dulcinea...
Página 129 - Brandabarbaran de Boliche, señor de las tres Arabias, que viene armado de aquel cuero de serpiente, y tiene por escudo una puerta que...
Página 363 - ... que parecía se iba a buscar de comer forzada de la necesidad; los brazos secos; las manos como un manojo de sarmientos cada una. Mirado de medio abajo parecía tenedor o compás, con dos piernas largas y flacas.
Página 157 - Salvador, ántes que venga este dia , habrá señales en el sol y en la luna , y en las estrellas , y finalmente en todas las criaturas del cielo y de la tierra ; porque todas ellas sentirán su fin ántes que fenezcan , y se estremecerán y comenzarán á caer , ántes que caigan.
Página 275 - ... las cuales tienen por objeto y fin, la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida: y así las primeras buenas nuevas que tuvo el mundo, y tuvieron los hombres, fueron las que dieron los ángeles la noche que fue nuestro dia, cuando cantaron en los aires: Gloria sea en las alturas, y paz en la tierra á los hombres de buena voluntad...
Página 338 - A todo esto el señor mi amo estaba en el púlpito de rodillas, las manos y los ojos puestos en el cielo, transportado en la divina esencia...
Página 276 - ... suceda , sino que el cielo piadoso le guarde y conserve sano y vivo, podrá ser que se quede en la misma pobreza que antes estaba , y que sea menester que suceda uno y otro reencuentro , una y otra batalla , y que de todas salga vencedor para medrar en algo ; pero estos milagros vense raras veces.
Página 278 - ... y con todo esto, viendo que tiene delante de sí tantos ministros de la muerte que le amenazan, cuantos cañones de artillería se asestan de la parte contraria...

Información bibliográfica