Imágenes de páginas
PDF
EPUB
[graphic]

FIGURA VARONIL, DE BRONCE, DEL SANTUARIO IBÉRICO DESCUBIERTO EN DESPEÑAPERROS (JAÉN)

[ocr errors]

dumentaria ibera que dan a conocer tan preciosos objetos. Nos limitaremos a lo esencial.

Figuras las hay en número de unas doscientas cincuenta, de hombre y de mujer, por lo general en pie, desnudas o vestidas, no pocas de éstas en la actitud propia de la plegaria o de la ofrenda; entre los hombres muchos guerreros, con sus armas, algunos a caballo. Buena parte de estas figuras, por lo común de un realismo sencillo, están bastante detalladas. Pero abundan las figuras esquemáticas, semiestilizadas o estilizadas, hasta el punto de que sólo tienen esbozada la cabeza y el cuerpo es una placa o un simple listón. Las hay de excelente factura, bien acabadas y detalladas, y las hay de ejecución descuidada o torpe, siendo éstas, por lo común, degeneraciones de los tipos buenos. Reconócense en tan variada colección algunos tipos nuevos y muchos ya conocidos. Salvo ciertas figuras que pueden considerarse ejemplares únicos, otras son repeticiones de un tipo consagrado y a veces productos de un mismo molde. Surge la sospecha de que algún que otro ejemplar puede ser representación de alguna deidad ibérica; pero los más son evidentemente adoradores que, por medio de su figura como exvoto, perpetuaban en el santuario su gratitud a la divinidad.

No solamente consisten estos exvotos en figuras, sino en miembros: cabezas, cuerpos, piernas o pies unidos o sueltos, como los exvotos o milagros de cera o plata modernos que en España y fuera de ella (de Suiza y de Rumania los señaló a este propósito el señor Sandars) se emplean y se ven en las iglesias cristianas. Entre esta clase de exvotos del paganismo ibérico aparecen en la presente colección, como tipos nuevos, unas dentaduras, alguna falta de un diente, y unos ojos.

También hay figuras de animal: caballos, un ciervo y un león. Sobresale entre las figuras humanas, por su tamaño y por su arte, una de guerrero, con su jubón o coselete ceñido, con la espada corta en la diestra. Le falta la cabeza, y mide de altura 0,23 (lám. IX). He de notar que esta figura, en pie, con los brazos caídos a los lados del cuerpo, las piernas largas, recuerda su prototipo el Apolo de Tenea, escultura arcaica griega del siglo vi antes de J. C. Otro excelente ejemplar, la figura de mujer (de 135 milímetros de altura), con una paloma en la mano izquierda (lám. X) también descubre algún parentesco con esculturas femeniles arcaicas de aquella misma época.

Estas indicaciones nos llevan a tocar otra cuestión que plantea el hallazgo, y es la fecha a que corresponden el santuario y sus exvotos. Cuestión es ésta que pareció escabrosa al señor Sandars, porque “si los exvotos - decía son de estilo ibérico y pre-romano, los vestigio que se encuentran en contacto con ellos son en su mayor parte romanos" 1. Los excavadores señores Calvo y Cabré deducen, del examen de las figuras, sus armas y otros detalles, que dicho recinto sagrado "tuvo su apogeo en pleno siglo iv antes de J. C., y probablemente siguió sin decaer en nombradía durante el siglo III" 2; es decir, que suponen corresponde a estos dos siglos el apogeo de la producción de esos bronces, y aun indican que se prolongó la vida del santuario durante la dominación romana.

Por nuestra parte vemos entre los bronces un buen número de ellos bastante arcaicos, que evidentemente vienen de modelos orientales y griegos del siglo vi antes de J. C., que es justamente cuando comienza, en nuestra Península, con la fundación de Ampurias, la colonización griega, a la cual, juntamente con la fenicia, se debe la formación del arte que llamamos ibérico; que hay un número de figuras aún mayor en el que, perdurando el elemento arcaico greco-oriental originario, se manifiesta un estilo realista genuinamente ibero y que debe corresponder a los siglos IV a II, y que las figuras esquemáticas representan la decadencia de esa producción de exvotos, siendo perfectamente admisible que muchos de los últimos daten de la época romana.

Un nuevo dato cronológico aportan, a mi juicio, las fíbulas cuya numerosa serie completa la de bronces. Todas, sin excepción, son de un tipo ibérico bien conocido, de la forma de aro circular, sobre el cual cruza un arco. Esta es la fíbula que lleva para cerrar el cuello de la túnica o vestidura interior la Dama de Elche, que, como es notorio, data del siglo v antes de J. C., fíbula de la cual se han recogido muy contados ejemplares en Numancia, lo cual permite creer que estaba ya en desuso cuando fué destruída la ciudad en 133 antes de J. C., de cuya fecha datan las numerosas fibulas de otros tipos recogidas entre las cenizas numantinas. Posible es también que dicha fíbula de Despeñaperros re

I Un centro de culto ante-romano. Ateneo, 1901, pág 379.

2

Memoria, págs. 19 y 24.

[graphic][ocr errors]

DOS FIGURAS FEMENILES, DE BRONCE, DEL SANTUARIO IBÉRICO DESCUBIERTO EN DESPEÑAPERROS (JAÉN)

« AnteriorContinuar »