la ley de 1908, promulgándose tras muy breve discusión la vigente de 22 de Julio de 1912.

Los principales extremos de la nueva ley modificando las normas del anterior, refiérense a la constitución numérica y electoral de los jurados, a su retribución y a la de los auxiliares del tribunal, a la defensa de los litigantes, al establecimiento de un juez especial en Madrid y Barcelona, al concepto de obrero y de patrono necesario para intervenir como jurado del tribunal, a las condiciones del veredicto, a los grados de apelación y a otros puntos de procedimiento de inferior interés (1).

Sin perjuicio de hacer notar en lugar oportuno las disposiciones más interesantes de nuestra ley de Tribunales industriales, en relación con el objeto de este estudio, señalaremos el cuadro esquemático de esta ley.

Consta de cinco Secciones y un capítulo de disposiciones adicionales.

En la Sección 1. explícanse los conceptos de patrono y. obrero a los efectos de esta ley; en la 2.a se plantea la organización de los Tribunales; en la 3.a señálase su competencia jurisdiccional; en la 4.a se regula el sistema electoral de los jueces; y, en la 5. se trata del procedimiento contencioso.

Publicamos a continuación tres cuadros estadisticos comprobantes de la actividad de los Tribunales industriales en España. Refiérense a la segunda etapa de esta jurisdicción en nuestro país (2).

(1) Con posterioridad a la ley de 1912, se dictaron numerosas disposiciones ~para llevar a cabo su cumplimiento práctico. Son las más importantes: el Real decreto 12 de Agosto 1912, relativo al funcionamiento de los Tribunales constituidos con arreglo al Real decreto de 20 de Octubre de 1908; la Real orden de 4 de Octubre de 1912, sobre trámites previos al establecimiento del Tribunal industrial; la Real orden de 14 Diciembre del mismo año concerniente a elecciones de jurados; la de 30 del mismo mes sobre dotación económica de estos Tribunales, la Real orden 26 Noviembre 1913, sobre bono de dietas a los jurados; y otras muchas disposiciones autorizando la creación de estos Tribunales en diversas poblaciones.

(2) El señor jefe de la Sección 2.a del Instituto de Reformas Sociales ha facilitado nuestra labor suministrando bondadosamente cuantos datos nos han sido necesarios.

Hacemos constar aquí nuestro reconocimiento al Sr. Buylla.