Colección de obras completas: La voz de la sangreRenacimiento, 1927 |
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Página 24
... tenía adelantada , a la vez que era des- cubierto el Nuevo Mundo . Estos recuerdos indistin- tamente evocan , bien el apogeo de la grandeza na- cional , o bien la no superada opulencia literaria de los siglos décimosexto y décimoséptimo ...
... tenía adelantada , a la vez que era des- cubierto el Nuevo Mundo . Estos recuerdos indistin- tamente evocan , bien el apogeo de la grandeza na- cional , o bien la no superada opulencia literaria de los siglos décimosexto y décimoséptimo ...
Página 43
Ricardo León. de amar . Así mostrando desde su juventud el dominio que tenía de las matemáticas puras y aplicadas en la construcción y proyecto de vías , puentes y faros , obras públicas e invenciones técnicas , dióse con gran afición al ...
Ricardo León. de amar . Así mostrando desde su juventud el dominio que tenía de las matemáticas puras y aplicadas en la construcción y proyecto de vías , puentes y faros , obras públicas e invenciones técnicas , dióse con gran afición al ...
Página 45
... tenía dentro de su espíritu más puros y dichosos lu- minares ; halló también hartas consolaciones en el amor de sus amigos y sus deudos , en los legítimos goces de su envidiable reputación , y pocos años más tarde fué su tránsito de ...
... tenía dentro de su espíritu más puros y dichosos lu- minares ; halló también hartas consolaciones en el amor de sus amigos y sus deudos , en los legítimos goces de su envidiable reputación , y pocos años más tarde fué su tránsito de ...
Página 142
... Tenía , pues era Dios , que superar al Hombre ! Padecer y morir por quien se ama , dar honra y vida , desgarrarse el pecho para entregar el corazón , son rasgos propios del hombre cuando el hombre siente llamear el espíritu en su carne ...
... Tenía , pues era Dios , que superar al Hombre ! Padecer y morir por quien se ama , dar honra y vida , desgarrarse el pecho para entregar el corazón , son rasgos propios del hombre cuando el hombre siente llamear el espíritu en su carne ...
Página 146
... Tenía entonces nuestra fe la santa ingenuidad , el vigoroso candor de las edades evangélicas ; la tierna sencillez , la majestad heroica de los siglos de hierro , bajo las elegancias de los clásicos ; era una cosa robusta , orgánica ...
... Tenía entonces nuestra fe la santa ingenuidad , el vigoroso candor de las edades evangélicas ; la tierna sencillez , la majestad heroica de los siglos de hierro , bajo las elegancias de los clásicos ; era una cosa robusta , orgánica ...
Términos y frases comunes
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Pasajes populares
Página 70 - A las aves ligeras, leones, ciervos, gamos saltadores, montes, valles, riberas, aguas, aires, ardores y miedos de las noches veladores.
Página 143 - El aire se serena y viste de hermosura y luz no usada, Salinas, cuando suena la música extremada por vuestra sabia mano gobernada. A cuyo son divino el alma, que en olvido está sumida, torna a cobrar el tino y memoria perdida de su origen primera esclarecida.
Página 111 - Pues sepa quien lo niega y quien lo duda que es lengua la verdad de Dios severo y la lengua de Dios nunca fue muda.
Página 28 - A reinar, fortuna, vamos; no me despiertes, si duermo, y si es verdad, no me aduermas; mas sea verdad o sueño, obrar bien es lo que importa; si fuera verdad, por serlo; si no, por ganar amigos para cuando despertemos.
Página 68 - Israel, llena de tropos e inspiraciones, de sonidos misteriosos y guturales, imitó las melodías del italiano, las voces compuestas del alemán, pero sin perder nunca su ser propio, tomando las cosas nuevas o extrañas para hacerlas suyas con invencible señorío, acomodándolas antes a su genio y virtud».
Página 34 - Aquí la alma navega por un mar de dulzura, y finalmente en él así se anega, que ningún accidente extraño o peregrino oye o siente.
Página 169 - Las aguas corrientes no son riqueza sólo; son vida del paisaje. Porque el agua posee los tres accidentes del vivir: luz, voz y movimiento; luz reflejada, como la luz de la pupila; voz ligera y amorosa, soñolienta y grave, como la voz de la garganta humana. No hay soledad donde el agua corre; no hay tristeza donde el agua mana; no hay desierto do'nde el agua vive. Fecunda el suelo y despierta el alma, arrulla el dolor, ensancha la alegría, es compañía y música, medicina y deleite; sobre sus...
Página 69 - Si Pablo Verlaine hubiera nacido en España, ¡qué versos no hiciera con este idioma nuestro, tan blando y flexible para el matiz, tan rico en armonías imitativas, tan dulce para el gusto musical!» No se puede ir más lejos; perdone nuestro antiguo y buen amigo Ricardo León. Pablo Verlaine no necesitaba para nada saber castellano; no hubiera hecho, sabiéndolo, mejores versos que los que hizo. Al idioma en que se han escrito — por no citar más que poetas modernos...
Página 162 - ... siglo de ensayos, siglo de diccionarios, siglo de diarios, siglo de impiedad, siglo hablador, siglo charlatán, siglo ostentador", en vez de los pomposos títulos de "siglo de la razón, siglo de las luces y siglo de la filosofía" con que le decoraban sus más entusiastas hijos.
Página 177 - El en su noble, en su robusta mano, La cruz, el cetro y el blasón tenía. Pudo España perder cota y acero; Si queda el corazón firme y entero, ¿Qué importa que se quiebre la coraza? Mas...