Desde que por vez primera, en este Monte escabroso, fulguró su rostro hermoso vuestra Imagen hechicera, todos con voz placentera Dicen llenos de fruición: Conducidnos, gran Señora, al puerto de salvación. Benignísima Patrona, abogada, norte y guía sois de este suelo alegría, y su brillante corona: oid al pueblo que entona himnos con grata emoción. Conducidnos, gran Señora, al puerto de salvación. A vuestras plantas postrados, ¡Oh Reina de tierra y cielo!... os pedimos con anhelo miréis por los desgraciados; y que obtengan los culpados fervorosa contrición. Conducidnos, gran Señora, al puerto de salvación. Bendecidnos, Reina excelsa, á cuantos hemos venido á este templo bendecido, para adorar vuestra alteza. Adiós, celestial Princesa, dadnos vuestra bendición. Ya que nuestra devoción en vuestro Monte os adora, conducidnos, gran Señora, al puerto de salvación. Сар. XVI.-Desaparición de la santa imagen. XVII.- El P. Alonso del Pozo... XVIII. Importantes mejoras en el Santuario. Pàgs. XXVIII. - Los primeros Religiosos en Montesclaros. XXIX. Ultimas obras en Montesclaros.. XXX. Una visita á Montesclaros.. XXXI. ---La merindad de Campóo sin la Virgen |