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para que pase, bien por la fachada del Norte, bien por la del Mediodia, hemos optado por la primera, no sólo por prestarse á un enlace más natural y cómodo con el fondeadero de Olaveaga, sino tambien por las condiciones topográficas del terreno: pues sube tan rápidamente por la parte Sur, que el enlace exigiria pendientes y contra-pendientes, ademas de grandes desmontes, miéntras que por la fachada del Norte puede llevarse á media ladera con una sola pendiente.

En la cuarta cláusula hemos dicho que la artéria principal debe ser completamente recta en la mayor longitud posible, cosa natural; pues al trazar una vía de comunicacion entre dos puntos. debe adoptarse la direccion más corta, á ménos que se tropiece con grandes obstáculos que sea preciso evitar con algunos rodeos; y si este principio debe tenerse presente al trazar un ferro-carril ó una carretera, con mayor razon debe cumplirse al proyectar poblaciones: 1.° porque debe evitarse el hacer sufrir rodeos inútiles al gran tráfico de la viabilidad urbana, mucho más grande é importante que el de una carretera; 2.o, porque los ángulos de las calles dificultan y entorpecen la locomocion de toda clase de vehículos; 3.o, porque si la vía que trata de abrirse, ha de favorecer ó perjudicar algunos intereses, es lo más justo que todos los propietarios á quienes alcance la inflexible ley de la línea recta participen de la misma suerte, sin privilegios ni monopolios de ninguna especie, y, finalmente, porque una calle tirada á cordel ofrece más regularidad y belleza que otra que tenga inflexiones.

Es indudable, por lo tanto, en virtud de estos principios, que ya que no es posible prolongar la calle de la Estacion, que el trazado de la vía es el más conveniente bajo este nuevo punto de vista; pero como quizás se nos arguya que existiendo abierta desde hace poco una calle que conduce de la encrucijada á la plaza de Abando, debe á toda costa utilizarse para que forme parte de la gran vía del ensanche, debemos manifestar que consideramos. inadmisible esta solucion, si se ha de estudiar un proyecto de ensanche de regulares dimensiones por los motivos siguientes;

miento de beneficencia de San Mamés, porque si bien reconocemos la imprescindible necesidad de establecer una vía de comunicacion de buenas condiciones entre Bilbao y dicho Asilo, consideramos que son de mucha mayor trascendencia los grandes intereses del órden administrativo y comercial, representados por los puntos de que nos hemos ocupado; que los sentimientos filantrópicos, si bien son muy laudables bajo todos conceptos, no serian suficientes para justificar que se les subordinen intereses tan trascendentales, ni para exigir una vía tan importante. Por esta razon hemos prescindido por completo del Asilo; pero en el caso presente y por una feliz coincidencia, resulta que la gran artéria termina no sólo en el punto más conveniente para el servicio comercial, sino en las inmediaciones de San Mamés, que quedará, por consiguiente, muy bien servido.

Tambien satisface el trazado de la vía á la tercera condicion, puesto que estará en contacto con la Estacion del ferro-carril de Tudela á Bilbao, tendrá fáciles comunicaciones con los muelles de Ripa, con la Estacion de Olaveaga, y recogerá por fin todo el tráfico de las carreteras de Santander y Portugalete por medio del ramal que á ellas conduce, lo cual será muy ventajoso para la viabilidad externa que sustituirá la carretera actual por otra mucho más corta, más llana y mejor por todos conceptos.

Es posible que, á no juzgar indispensable el llenar este requisito, hubiéramos dirigido el eje de la avenida desde el centro de la encrucijada de la Estacion al centro de la fachada de San Mamés, que es un edificio de bastante importancia; pero en nuestro entender, las vías principales no deben interrumpirse por ningun concepto, á fin de que puedan proporcionar fácil enlace con las vías afluentes.

Por otra parte, la administracion debe ser previsora y no sería prudente, en nuestra opinion, bajo el punto de vista estratégico, abrir una calle recta de 1.600 metros, completamente dominada por un edificio que por un golpe de mano podria ser conquistado, y desde el que se podria barrer la calle en toda su extension.

Debiendo desviarse el eje de la avenida del centro del edificio,

para que pase, bien por la fachada del Norte, bien por la del Mediodia, hemos optado por la primera, no sólo por prestarse á un enlace más natural y cómodo con el fondeadero de Olaveaga, sino tambien por las condiciones topográficas del terreno; pues sube tan rápidamente por la parte Sur, que el enlace exigiria pendientes y contra-pendientes, ademas de grandes desmontes, mientras que por la fachada del Norte puede llevarse á media ladera con una sola pendiente.

En la cuarta cláusula hemos dicho que la artéria principal debe ser completamente recta en la mayor longitud posible, cosa natural; pues al trazar una vía de comunicacion entre dos puntos. debe adoptarse la direccion más corta, á ménos que se tropiece con grandes obstáculos que sea preciso evitar con algunos rodeos; y si este principio debe tenerse presente al trazar un ferro-carril ó una carretera, con mayor razon debe cumplirse al proyectar poblaciones: 1.° porque debe evitarse el hacer sufrir rodeos inútiles al gran tráfico de la viabilidad urbana, mucho más grande é importante que el de una carretera; 2.o, porque los ángulos de las calles dificultan y entorpecen la locomocion de toda clase de vehículos; 3.o, porque si la vía que trata de abrirse, ha de favorecer ó perjudicar algunos intereses, es lo más justo que todos los propietarios á quienes alcance la inflexible ley de la línea recta participen de la misma suerte, sin privilegios ni monopolios de ninguna especie, y, finalmente, porque una calle tirada á cordel ofrece más regularidad y belleza que otra que tenga inflexiones.

Es indudable, por lo tanto, en virtud de estos principios, que ya que no es posible prolongar la calle de la Estacion, que el trazado de la vía es el más conveniente bajo este nuevo punto de vista; pero como quizás se nos arguya que existiendo abierta desde hace poco una calle que conduce de la encrucijada á la plaza de Abando, debe á toda costa utilizarse para que forme parte de la gran vía del ensanche, debemos manifestar que consideramos inadmisible esta solucion, si se ha de estudiar un proyecto de ensanche de regulares dimensiones por los motivos siguientes;

1. El trozo de calle mencionado es muy estrecho para que pueda formar parte de la vía pública más importante del ensanche, siendo tambien defectuosa su orientacion, como luégo verémos. 2. Si se prolonga dicha calle en línea recta, como parece lo natural, seguiria una direccion tan desacertada, que no cumpliria ninguna de las condiciones que hemos enunciado, ni serviria tampoco el Asilo de San Mamés, del que se alejaria muchísimo. 3.o Si pasada la plaza de Abando torciésemos á la izquierda para que la nueva enfilacion terminára en el punto que hemos designado como más conveniente para final de la gran vía, entónces, ademas de resultarnos desde el puente del Arenal una calle con cuatro alineaciones, tropezariamos con el inconveniente de que este ángulo se reproduciria en todas las calles paralelas, á ménos de variar su direccion respecto al eje. 4.° Para disimular el ángulo de que hablamos, habria que hacer una plaza completamente inútil bajo otros conceptos y que originaria grandes gastos de expropiacion, mientras que con la solucion directa es innecesaria y puede situarse, con muchas más ventajas, en los terrenos que posee la municipalidad frente á la iglesia de Abando. 5. No habiéndose edificado todavía ni una sola casa en la calle que tratamos de abandonar, no puede presentarse en apoyo de aquel trazado el argumento de que se perjudiquen intereses ya creados.

Hemos dicho en la cuarta condicion, que debe tenerse presente en el trazado de las vías urbanas la orientacion y exposicion respecto á los vientos dominantes; como este asunto lo hemos de tratar más detenidamente en otro lugar, sólo indicarémos que hemos tenido en cuenta la circunstancia de que la orientacion de la vía preserva á esta bastante de los vientos del NO., que son los de los grandes temporales de esta costa; puesto que su eje tiene el rumbo de O. 15° 30' NO. y forma, por lo tanto, un ángulo de 29° 30' con el NO., mientras que si hubiéramos aprovechado la calle que existe hoy en dia, se hubiera hallado en aquel trozo enfilada por los NO. con los que sólo forma un ángulo de 4° 40' hácia el N. Los huracanes más grandes suelen ocurrir en esta

villa cuando los vientos soplan del S., y por lo tanto la orientacion de la gran calle es completamente satisfactoria para este

caso.

La quinta condicion establece que, cuando los límites jurisdiccionales del ensanche se conocen de antemano, como sucede en el caso presente, debe procurarse que la gran vía central divida en dos partes próximamente iguales la zona que han de ocupar los nuevos barrios y que su longitud sea la mayor que pueda inscribirse en el perímetro de la nueva poblacion. Basta dirigir una mirada al plano, para convencerse de que nuestro proyecto es el que puede llenar más satisfactoriamente este requisito.

Finalmente, la sexta cláusula previene que debe tenerse muy en cuenta el problema económico á fin de que el proyecto sea realizable, y áun bajo este concepto verémos que el trazado reune condiciones aceptables. En efecto, los únicos edificios que será preciso demoler para la apertura de esta calle, son la posada de Manzanares, casa compuesta de planta baja y principal, una tejavana de escaso valor, propiedad de los Sres. Zabálburu, y un caserío de sólo planta baja situado al final de la vía. Hay tambien una casa de la calle de la Estacion y un caserío, que se internan uno o dos metros en la acera, pero no es necesario sujetarlos inmediatamente á la alineacion, sino que puede aguardarse á que se reedifiquen ó se reformen.

Una advertencia nos resta que hacer sobre el trazado de esta calle, y es que, aunque en muy corto trayecto, se sale de la jurisdiccion de Bilbao, efecto de la anómala irregularidad que presentan en aquel punto los límites de la nueva jurisdiccion, que forman un ángulo entrante muy pronunciado; pero no creemos esto motivo para que se estudie un proyecto de ensanche definitivo, sino que, por el contrario, se nos figura debe de estar combinado de modo que se pueda enlazar convenientemente con las anexiones sucesivas que hayan de verificarse, y que lo procedente es tratar de un arreglo de los límites de esta parte. Volverémos á ocuparnos de este asunto al tratar del camino de ronda,

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