Los Sueños

Portada
Imp. Sucesores de Ramirez y Ca., 1881 - 367 páginas
 

Contenido

I
7
II
23
III
41
IV
91
V
115
VI
169
VIII
187
IX
205
X
223
XI
281

Otras ediciones - Ver todas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 45 - Volvíme a la mano izquierda y vi un acompañamiento tan reverendo, tanto coche, tanta carroza cargada de competencias al sol en humanas hermosuras y gran cantidad de galas y libreas, lindos caballos, mucha gente de capa negra y muchos caballeros.
Página 338 - Parióme adrede mi madre, ¡ojalá no me pariera!, aunque estaba cuando me hizo, de gorja naturaleza. Dos maravedís de luna alumbraban a la tierra, que por ser yo el que nacía, no quiso que un cuarto fuera. Nací tarde, porque el sol tuvo de verme vergüenza, en una noche templada entre clara y entre yema. Un miércoles con un martes tuvieron grande revuelta, sobre que ninguno quiso que en sus términos naciera.
Página 313 - ... poderoso caballero es don Dinero. Nace en las Indias honrado, donde el mundo le acompaña; viene a morir en España y es en Genova enterrado. Y pues quien le trae al lado es hermoso, aunque sea fiero, poderoso caballero es don Dinero.
Página 9 - Parecióme, pues, que veía un mancebo que, discurriendo por el aire, daba voz de su aliento á una trompeta, afeando con su fuerza en parte su hermosura.
Página 9 - ... caza. Esto conocía yo en los semblantes de cada uno y no vi que llegase el ruido de la trompeta a oreja que se persuadiese a lo que era. Después noté de la manera que algunas almas huían, unas con asco y otras con miedo, de sus antiguos cuerpos.
Página 342 - Vine á ser tu pretenmuela. Bien sé que apenas soy algo, Mas tú de puro discreta, Viéndome con tantas faltas, Que estoy preñado sospechas.
Página 94 - Ni te estorbo ni te envidio lo que deseas ; antes te tengo lástima. ¿Tú, por ventura, sabes lo que vale un día? ¿ Entiendes de cuánto precio es una hora ? ¿ Has examinado el valor del tiempo?
Página 124 - En esto entró una que parecía mujer, muy galana y llena de coronas, cetros, hoces, abarcas, chapines, tiaras, caperuzas, mitras, monteras, brocados, pellejos, seda, oro, garrotes, diamantes, serones, perlas y guijarros. Un ojo abierto y otro cerrado, y vestida y desnuda de todos colores.
Página 49 - Iban las mujeres al infierno tras el dinero de los hombres, y los hombres tras ellas y su dinero, tropezando unos con otros.
Página 18 - Vino un caballero tan derecho, que al parecer quería competir con la misma justicia que le aguardaba : hizo muchas reverencias á todos, y con la mano una ceremonia usada de los que beben en charco. Traía un cuello tan grande, que no se le echaba de ver si tenía cabeza.

Información bibliográfica