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entonces claramente la distincion entre dos partidos que han desgarrado á la par el seno de la patria, con los diferentes nombres que mas adelante veremos.

El gobernador y la mayoría de la legislatura de Veracruz pertenecian al partido escoces.

El 1o de Enero abrió sus sesiones el primer congreso general constitucional, dividiéndose en dos cámaras.

El constituyente habia arreglado el sistema de contribuciones, dejando á los Estados las que parecia pertenecerles por ser enteramente locales, atribuyendo á la tesorería general los productos de las aduanas marítimas, así como las rentas del tabaco, correo y salinas, repartiendo tres millones de continte entre los Estados.

Las intendencias tomaron el nombre de comisarías generales, teniendo los nuevos empleados atribuciones mas vastas que los intendentes.

Se estableció una tesorería general para examinar las cuentas y los presupuestos de los secretarios de hacienda, con objeto de dar cuenta con los resultados á la comision inspectora de la cámara de diputados, que era la que fallaba acerca de las divergencias entre el ministro y el contador general.

Una oficina que de nada servia fué la contaduría de crédito público.

El 21 de Agosto salió de Veracruz para México el enviado de los Países Bajos, Mr. Quartel, & quien tambien le fué preparado en Jalapa un conveniente alojamiento. A éste se le trató lo mismo que á Poinsett, pero modificando la manera de obsequiarlo, segun la siguiente órden de Barragan: "Mañana sale de esta el Sr. D. H. I. Quartel, enviado del rey de Holanda cerca del gobierno de la Federacion mexicana; y teniendo prevenido el gobierno que á esta clase de sugetos se les atienda con un decente alojamiento y aquellas comodidades que por ser extranjeros sin relaciones en el país, les es dificil proTOMO II.-47

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Ea Ocrabre se publiana en Malaga ke tranke celebruks entre mestra replay Coimba is reasa del ministro de relaciones Alaman, y tambien el decreto que Lana extenKiro 4 Toe comapiradores el am 11 de la ley de 27 de Setembre de 1823 que trata de la imones en esta y el decreto de 27 del mismo mes que fjaba las atribaciones de los vice-casales mexicanoe.

El 21 de Noviembre se recibió en Jalapa la noticia oficial de la rendicion de Ulla, cuya fortaleza recibió el coronel D. Antonio Juille y Moreno, á cuyo señor hemos visto de realista decidido en 1813 y que mandó las compañías urbanas hasta que fueron incorporadas al batallon 2: Fijo de Veracruz en 1821, en cuyo batallon continuó sirviendo en calidad de teniente coronel, hasta que en 1823 fué elevado al grado de coronel.

El brigadier D. José Coppinger relevó á Lemaur á principios de este año y el castillo habia seguido recibiendo provisiones de la Habana hasta mediados de él, sin mas contratiempo que la pérdida de la goleta anglo-americana "Herman," apresada por la mexicana "Iguala," y de otra goleta tambien norteamericana que fué echada á pique por los fuegos de la plaza, habiendo anclado en la bahía enfrente de esta.

Pero aumentada nuestra marina nacional con la fragata "Libertad" y los bergantines "Victoria” y “Bravo,” que compró en Inglaterra el ministro de México D. Mariano Michelena.

llegó por fin el dia en que se rindiera la fortaleza, estrechada por el bloqueo que impedia llegar á ella auxilio alguno.

Así aislados los 400 soldados de Ulúa, pronto resintieron los efectos crueles de la falta de víveres frescos y se derarrolló entre ellos la enfermedad del escorbuto, que hizo su situacion mas desesperada y puso fuera de combate una gran parte.

Desde mediados de Setiembre se entablaron relaciones entre el general Barragan y el brigadier Coppinger por medio del súbdito inglés Welsh, entonces cónsul en Veracruz y hermano del que mas tarde se hizo notable en el mismo puerto como vice-cónsul de su nacion.

Barragan trataba de inclinar al gefe español á que entregara la fortaleza por medio de una capitulacion, pero éste confiado en que muy pronto recibiria de la Habana algun auxilio de gente y provisiones, no se prestó á ello.

Coppinger tenia razon de esperar, pues el 5 de Octubre se presentó á la vista de Veracruz un convoy, compuesto de cuatro buques de guerra españoles que conducian tropa y víveres.

Reconocidos por la escuadrilla mexicana anclada en Sacrificios, tomó esta la gente y todo lo necesario para el combate, y en la madrugada del 6 salió á la mar en busca de los buques enemigos.

Nuestros buques eran los siguientes: fragata "Libertad," bergantines "Victoria" y "Bravo," goletas "Papaloapam," "Tampico" y "Orizava," pailebot "Federal" y balandra "Chalco," mandados todos por el capitan de la marina inglesa D. Cárlos Smit, teniendo por segundo al comandante Baranda.

Ambas escuadrillas se encontraron muy cercanas á las cuatro y media de la tarde, y los buques mexicanos se presentaron en línea desafiando á los enemigos al combate, que no tuvo lugar, tanto por acercarse la noche, cuanto por haber comen

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1825 zało & soplar un rado viento del Norte, que dispersó ambas

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Lae mexicanas se reunieron el 10 en Sacrifios y despues se situaron en la lla Blanquilla para impedir que los baques españoles se acercaran al castillo.

La escuadrilla enemiga volvió á presentarse el 11 y la mexicana se sita' 4 la entrada del canal: á las diez de la mañana avanzaron aquello baques como retando á los nuestros al combate; pero estos permanecieron en su lugar y los españoles se hicieron de la vuelta afuera á las dos de la tarde, y tomaron rumbo para la Habana.

Estando todo dispuesto para atacar con la marina el castillo, intimó la rendicion el general Barragan el 5 de Noviembre en el término de 24 horas, por Orden del supremo gobierno que mandó estrechar el sitio; se le contestó pidiéndole un armisticio. Barragan propuso á Coppinger una entrevista en un buque entre la fortaleza y la plaza, pero éste se negó á ello, y á su vez solicitó de aquel que pasase en la noche á la fortaleza ó enviase oficiales en su nombre, segun se verificó, acordándose la capitulacion en 14 artículos que fueron ratificados el 18 de Noviembre.

La conducta de Barragan, á la que coronó el mas feliz éxito, le grangeó las simpatías del Estado y del Ayuntamiento de Jalapa; mandó éste que el nombre de aquel general se inscribiese en el libro de acuerdos con letras de oro, y se fijara su retrato en la sala de cabildo.

Los soldados del castillo estaban tan macilentos y débiles, que apenas habia quedado un grupo que pudiera manejar las piezas en las salvas que se hacian en él.

Decaida la última esperanza de la estenuada guarnicion de Ulúa, continuaron las contestaciones del gefe español con el general Barragan, presentando á éste el 17 de Noviembre los oficiales comisionados por aquel un proyecto de capitulacion

que, con ligeras modificaciones fué aceptado y ratificado el siguiente dia 18.

Contenia 14 artículos y fué celebrada por los Sres. capitanes D. Miguel Suarez del Valle y D. Domingo Labrú por parte del comandante del castillo, y entregada en persona al general D. Miguel Barragan. En ella obtuvieron los españoles todas las ventajas y honores que podian apetecer.

Al salir de la fortaleza se les concedian todos los honores de la guerra en los términos usados en tales casos, podian sacar 4 piezas de artillería y los equipajes y enseres necesarios para la comodidad y descanso.

Los enfermos pasarian á la plaza de Veracruz, y serian trasportados á la Habana despues de su restablecimiento.

Las tropas que formaban la guarnicion del castillo debian ser conducidas á la Habana por cuenta de los bloqueadores, á la mayor brevedad posible, en buques que prestaran comodidad y convoyados por uno de guerra, para evitar las depredaciones de los piratas.

Continuaria el pabellon español en la fortaleza hasta que se dieran á la vela todos los españoles y hasta entonces no podian los mexicanos pasar á ocuparla. Al arriar el pabellon español seria saludado por las baterías de la plaza.

Esto se arreglaba en los 4 primeros artículos, y los siguientes hasta el 8: trataban acerca de la manera de entregar las municiones y demas efectos existentes en el castillo así como los archivos.

El 9° aseguraba las propiedades existentes en la plaza de Veracruz pertenecientes á personas que hubieran emigrado por ser afectas al gobierno español.

Los restantes trataban de los prisioneros que por ambas partes debian quedar libres y de la seguridad de los buques españoles que pudieran llegar, para lo cual se concedian 90 dias.

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