A la Poeal Academia de la Historia.

Excmo. Señor.

En el tomo VI de las apreciables MEMORIAS que va publicando esa Real Academia, en la página 49 de la Noticia histórica de sus sesiones anuales se lée lo siguiente: «Merece particular elogio el animoso pensamiento en cuya ejecucion se halla empeñado nuestro individuo el Sr. D. Felix Torres Amát de escribir una Biblioteca de Escritores catalanes. En el papel que nos remitió sobre este asunto manifiesta la importancia y extension de su proyecto: refiere las • diligencias y preparativos que tiene hechos para efectuarlo, el plan que se ha propuesto seguir, la noticia que ha adquirido de mas de dos mil escritores catalanes, y los medios con que cuenta para con⚫tinuar y perfeccionar su biblioteca. La Academia desea vivamente ▪que asi se verifique; y que aquella benemérita provincia, donde se han refugiado y hallado generoso fomento algunos restos de la ilus▪tracion, que va conocidamente á menos, y amenaza apagurse to⚫talmente en otras de la Península, goce de la gloria literaria debi▪da á los sabios é ilustres hijos que la han ennoblecido en todos tiem⚫ pos».

Puedo asegurar á V. E. que desde que leí esta honrosa mencion que hizo la Academia de mi difícil empresa, se redoblaron mis esfuerzos para llevar á cabo su ejecucion. Pero conozco que ya me es imposible añadir, como era de desear, el juicio crítico de todas las dos mil y mas obrus impresas de que doy noticia; y me he de ceñir á darle de las prin

cipales que yo he podido leer, ó que han leido algunos amigos. No creo que deba esto retraerme de publicar estas Memorias, viendo que tampoco pudo hacer la censura de todas las de su Biblioteca el eruditisimo y laborioso biógrafo D. Nicolás Antonio: el cual advierte que e. casi imposible á un particular el leer y formar un juicio crítico de todas las producciones de los escritores, cuya noticia recogió; cuando son estos en número muy grande y de tan diferentes materias.

El ministerio episcopal á que me destinó la Providencia me ha obligado á levantar la mano de estas amenas tareas que me han servido de honesta y útil diversion durante los mejores años de mi vida. Recuerdo que en estos diez últimos la Academia ha oido en varias sesiones, y me parece que sin disgusto, la lectura de todos los artículos principales del proyectado diccionario ó Biblioteca de es critores catalanes, cuyo título he creido deber mudar en el de Memorias para ayudar á formar un diccionario crítico de los escritores catalanes y dar alguna idea de la antigua y moderna literatura de Cataluña. Me atrevo pues á esperar del ilustrado zelo con que la Academia ha tenido la bondad de animarme de palabra y por escrito á publicar estos apuntes, que me dispensará el honor de aceptar y tener por suyo este pequeño fruto de mis ocios literarios; fruto, que por escaso é inmaturo que sea, confio que podrá servir de alguna utilidad á aquellos beneméritos individuos suyos que publiquen con el tiempo la historia literaria de nuestra España, ó de los adelantamientos que el ingenio español ha hecho en las ciencias y artes y demas conocimientos conexos con el saber y civilizacion del género humano. Algo se resiente mi amor propio en que se impriman estas Memorias sin las mejorus, adiciones y correcciones que me prometia hacer en ellas: pero el temor de que se pierdan unas noticias extraidas de tan diferentes libros y manuscritos particulares, algunos de fuera del reino, que tanto trabajo han costado de recoger, y la reflexion de que Cataluña mi amada patria es la sola provincia de España que no ha cuidado de publicar sus glorias literarias, contentándose con merecerlas, factis, non dictis, como decia el sabio cronista aragonés Blancas, me impele á dar á luz mis apuntes biográfico literarios. El Obispo de Astorga, que tanto se ha honrado siempre con el

distintivo de individuo de esa sabia Corporacion, á la cual debe de justicia ofrecer alguna muestra de gratitud, no puede por puede por ahora presentarle otra que la de dedicarle estas Memorias para la historia literaria de Cataluña, las que espera recibirá con su sólito agrado, disimulando su imperfeccion.

Madrid 18 de Marzo de 1835.

Exauo. Señor.

Felix, Obispo de Astorga.

Ilmo. Señor.

que

La mencion que esta Real Academia hizo al principio del tomo VI de sus Memorias, y que V. S. I. le recuerda en su carta de 18 del corriente, del animoso empeño con que se habia dedicado V. S.I. á escribir una Biblioteca de escritores catalanes; no fué sino una lijera muestra asi del concepto que le merecia lo glorioso y grave de la empresa, como de la bien fundada confianza de que el saber y laborioso zelo del autor la llevarian á cabo con el mas feliz suceso. Asi al ver ahora confirmadas su opinion y sus esperanzas, no puede menos de congratularse con V. S. I. y desear nada demore la publicacion de una obra tan importante. Es á la verdad hasta cierto punto sensible que V. S. I. no haya podido dar á su propósito toda la extension con que lo habia concebido. Pero la Iglesia y el Estado han necesitado del tiempo y de las tareas de V. S. I., y á tan altos respetos nada hay que pueda anteponerse. Fuera de que aun en la forma y bajo el muy modesto título en que ha resuelto V. S. I. publicar su obra, ofrece esta sobradísimo interés para merecer un distinguido aprecio no solo de los amantes de las glorias de nuestra livale el coteratura nacional, sino tambien entre cuantos saben lo que nocer la historia de los progresos del ingenio humano. Por tanto la Academia admite gustosísima la dedicatoria, que un tan benemérito individuo suyo le ofrece de este precioso fruto de sus afanes literarios; recibiendo esta generosa fineza como una nueva prueba añadida á las muchas otras que V. S. I. la tiene dadas de su afecto y consideracion á este Real Cuerpo. Y de acuerdo del mismo tengo el honor de comunicárselo.

Dios guarde á V. S. I. muchos años.

Madrid 30 de marzo de 1835.

ILLMO. SR.

VICENTE GONZALEZ ARNAO, Secretario.