Album literario españolEstab. tip. de D.F. de P. Mellado, 1846 - 320 páginas |
Otras ediciones - Ver todas
Términos y frases comunes
aliento alma Almanzor amigo amor antiguo ardiente Bailen baron de Montigny bella botas brillo buen cabeza calavera calle Capitan Montoya capitulacion Cesante Cesar cielo Clementina conde de Tilly condes de Egmont corazon corre cruz colorada deja demas despues dice dijo dolor Dupont duque enemigo ENRIQUE entonces escesos escitado escuchar espanto España españoles esperanza estaba estraño estremo eterna Fadrique falta fatal Felipe Felipe II Flandes flor franceses Francisco Javier Castaños furor gefes Ginés gloria habia halla hermosa hijo inocente Isabel de Valois labios llega llorar madre Claudia mano mirar monarca moro muerte Muger del Mundo niña noble noche nuevo mundo ojos padre palacio pasiones paso pecho persona pié piélago pies placer podia príncipe de Asturias príncipe Don Carlos pudo puerta queda quiere régio reino ROSMUNDA solia sombra suelo tambien tierna todavia Toledo triste trono Vedel ventura verdad vieja viento Zulima
Pasajes populares
Página 155 - Aquilones; El estrépito y temblor De los cables sacudidos; Del negro mar los bramidos Y el rugir de mis cañones. »Y del trueno Al son violento, Y del viento Al rebramar, Yo me duermo Sosegado, Arrullado Por el mar. »Que es mi barco mi tesoro, Que es mi Dios la libertad, Mi ley la fuerza y el viento, Mi única patria la mar.
Página 57 - Soy, señor, vuestro vasallo; vos sois mi rey en la Tierra, a vos ordenar os cumple de mi vida y de mi hacienda. «Vuestro soy, vuestra mi casa, de mí disponed y de ella, pero no toquéis mi honra y respetad mi conciencia. »Mi casa Borbón ocupe puesto que es voluntad vuestra, contamine sus paredes. sus blasones envilezca...
Página 54 - El emperador un punto quedó indeciso y suspenso sin saber qué responderle al francés, de enojo ciego. Y aunque en su interior se goza con el proceder violento del conde de Benavente. de altas esperanzas lleno por tener...
Página 152 - La luna en el mar riela, en la lona gime el viento, y alza en blando movimiento olas de plata y azul...
Página 48 - ... una corona de tristes siemprevivas ; y los ojos apenas alzas, descubrir temiendo el monumento de perpetua pena que de tu esposa las cenizas guarda... Tanto infeliz como acorrió piadosa, tanto huérfano pobre y desvalido de que fue tierna madre, los que un día su bondad y sus prendas admiraron, en largas filas, silenciosos, mustios, tus pasos lentamente van siguiendo, y cercan su sepulcro...
Página 154 - Que es mi barco mi tesoro. . A la voz de "¡Barco viene!" es de ver cómo vira y se previene a todo trapo a escapar: que yo soy el rey del mar, y mi furia es de temer. En las presas yo divido lo cogido por igual: sólo quiero por riqueza la belleza sin rival.
Página 51 - Toledo, cuyas paredes adornan ricos tapices flamencos, al lado de una gran mesa que cubre de terciopelo napolitano tapete con borlones de oro y flecos, ante un sillón de respaldo, que entre bordado arabesco los timbres de España ostenta y el águila del Imperio, de pie estaba Carlos Quinto, que en España era primero, con gallardo y noble talle, con noble y tranquilo aspecto.
Página 1 - AL MAR. Calma un momento tus soberbias ondas, Océano inmortal , y no á mi acento Con eco turbulento Desde tu seno liquido respondas.
Página 10 - Sabaoth su espada ardiente. Venció la excelsa cumbre de los montes el agua vengadora ; el sol, amortecida la alba lumbre que el firmamento rápido colora, por la esfera sombría cual pálido cadáver discurría. Y no el ceño indignado de su semblante descogió el Eterno. Mas ya, Dios de venganzas, tu Hjo amado, domador de la muerte y del averno, tu cólera infinita extinguir en su sangre solicita. ¿ Oyes, oyes cuál clama : «Padre de amor, por qué me abandonaste?
Página 8 - ¿Y eres tú el que velando la excelsa majestad en nube ardiente, fulminaste en Siná? Y el impío bando, que eleva contra ti la osada frente, ¿es el que oyó medroso de tu rayo el estruendo fragoroso? Mas ora abandonado, ¡ay!, pendes sobre el Gólgota, y al cielo alzas gimiendo el rostro lastimado.