tiene siempre el método, para los que saben

que éste lo puede todo en la enseñanza, y que no es indiferente, para asimilarse las ideas, el orden con que á la inteligencia se presentan.

Por lo demás, estos ELEMENTOS, prescindiendo completamente de todo comentario que los hubiera desvirtuado, porque los habría hecho más extensos, contra el propósito del autor y la índole de este género de obras, resumen, limitándose á exponerla con la mayor claridad, la doctrina jurídica contenida en las que se han publicado hasta el día, las cuales se han tenido, como es natural, presentes y puéstose á contribución por el Sr. Carreras y González para formar de todas ellas, como la abeja de las flores, una menos bella, sin duda, pero más jugosa y de una apli– cación más extensa. De esta manera puede servir de base al estudio de los alumnos, y de punto de partida á las consideraciones críticas y á los desenvolvimientos orales del catedrático.

Compendio completo de todo lo presente, no hay en ella la pretensión de haber dicho nada nuevo, sino algo de una manera nueva, non nova sed nove, y estriba principalmente su mérito en la composición y en el estilo, que, siendo correcto y castizo, como lo es siempre el del Sr. Carreras y González, ya ventajosamente conocido como escritor político y literario, huye estudiadamente de la afectación del tecnicismo y no emplea palabra que no sea conocida ó que él no defina inmediatamente, á fin de hacer diáfanas las ideas y ponerlas al alcance de los profanos en la cien

cia, á quienes ofrece así un camino sin tropiezos que fácilmente pueden recorrer por sí mismos.

Tales son las cualidades que hacen de estos ELEMENTOS, á la vez que un libro de utilísima lectura privada, sobre todo entre los comerciantes, una excelente obra de texto para los alumnos de las carreras de Jurisprudencia, de Admistracción, del Notariado y de Comercio, á quienes se destina.

mente á esa nueva forma dada á los estudios jurídico-mercantiles, se hacía sentir por todos los profesores una obra en relación con los mismos que, acomodándose á las exigencias de la enseñanza, no se limitase á nuestro Derecho, sino generalizase el estudio al de todos los Códigos mercantiles europeos y americanos. Ninguna de las existentes comprendía

lo que la reforma requería, siquiera algunas, como la de los distiguidos y notables profesores Sres. Martí Eixalá y Durán y Bas, merecerán siempre veneración y respeto de cuantos por ella tuvimos la gloria de estudiar. Así esta obra como la de los Sres. Laso, Huebra, Tapia y algunas otras servirán siempre para darnos á conocer los principios fundamentales de la

ciencia, mas no para estudiarla según en nuestros tiempos está organizada.

En cuanto á los ELEMENTOS DEL DERECHO MERCANTIL del Sr. Carreras y González tal como han aparecido en ediciones anteriores, y prescindiendo de la importancia en otras esferas de su autor, bajo el concepto jurídico obtuvo éste uno de los mejores y más preferentes puestos entre los escritores y expositores del Derecho, y de su forma y su saber ofrecen cumplida cuenta no sólo dicha obra, sino muchas otras que harán su nombre imperecedero, y acaso constituyen la mejor y única herencia de sus hijos, porque el Sr. Carreras y González, como verdadero sabio, murió pobre, de igual modo que tantos otros que al estudio dedicaran su vida entera.

Por este tiempo, y después de la última reforma del Código mercantil, publicaron reputados jurisconsultos, gloria del Foro los unos y del Parlamento los otros, algunas obras que, limitándose á hacer notar las analogías ó diferencias que entre aquél y los extranjeros existen, no se acomodan, sin que este nuestro juicio pueda ofenderles, á las formas didác ticas exigidas en la enseñanza de la Legislación mercantil.

A realizarlo aspiró el Sr. González Revilla, distinguido hijo de esta Escuela, publicando primeramente un Apéndice á la cuarta edición de la obra del señor Carreras y González (que él había refundido), con el título RESUMENES DE LEGISLACIÓN MERCANTIL COMPARADA Y SISTEMAS ADUANEROS, y ahora el mismo

Sr. González Revilla cumple por entero semejante aspiración con la publicación de la presente obra (1).

Al efecto ha dividido su trabajo, siempre sobre la base de la obra de Carreras y González, en doce libros ó capítulos, que constituyen como la metódica clasificación de las materias que son objeto de nuestro moderno Código.

Forma la primera parte una que podemos llamar introducción ó principios generales del Derecho común, pues si bien en el orden actual de los estudios precede el del civil al mercantil, no por eso es menos necesario dar idea de aquellas nociones, sin las que no es fácil penetrar en el conocimiento técnico de una ciencia, dando diafanidad á los conceptos y poniéndolos al alcance, no sólo de los que á la carrera del Derecho se dedican, sino hasta de los ajenos á ella, pero que por su profesión ó sus aficiones pueden tener necesidad de consultar una obra de las condiciones de la presente.

Siguen después dos libros especialmente dedicados al estudio de la historia de la Legislación comercial, desde las épocas primitivas hasta nuestros días, marcando con precisión y estudio las múltiples evo. luciones ocurridas, y al llegar la época moderna se trazan perfectamente las diversas escuelas que se siguen en la formación de los Códigos mercantiles, aceptando unas como su fuente y fundamento el francés, y apartándose de él otras, tal vez porque si bien

(1) Se refiere á la quinta edición.

al tiempo de su primitiva formación pudo satisfacer las necesidades todas del comercio, hoy, después de los adelantos, del ensanche y desenvolvimiento del Derecho, ya no satisface cuanto en la práctica se exige, y de aquí que, bajo un nuevo plan, se modelaron varios Códigos.

Los libros restantes se ocupan con suficiente extensión de presentar todas y cada una de las materias que de esta asignatura son objeto, procurando, para hacer más fácil su estudio, abarcar en cada una de ellas todo lo que puede considerarse común al comercio terrestre y marítimo. Donde se advierte mayor claridad y precisión es en el tratado de los contratos, que, bajo aquel perfil general explicados, satisface todas las indicaciones para conocer su diversa naturaleza, extensión, efectos é interpretación de cada uno de ellos, sin olvidar los medios de justificación y los de extinción.

Además del texto de las disposiciones legales hoy vigentes en España, se ocupa este libro de la comparación con la mayor parte de los demás Códigos de Europa y América, y, como si ya esto fuera poco, consigna la jurisprudencia de los Tribunales en materias mercantiles, procurando dar así á los ELEMENTOS un doble carácter teórico y eminentemente. práctico.

Por tales consideraciones, no hemos de decir es este libro una de esas obras sin defectos, no; seguramente puede tenerlos; pero con su método, clara exposición y estilo correcto y castizo han conseguido