Recreaciones de la plumaEmpresa El Cojo, 1909 - 210 páginas |
Otras ediciones - Ver todas
Términos y frases comunes
abnegación admirable adorable agitan agra alegría alma almas amor ANGEL GANIVET anhelos apóstoles aromas aspiraciones belleza bello Bolívar Bossuet bres brilla calma campo Caprino Carabobo Caracas cias cielo ciencia ción ciudadanos civilización Colombia combate conciencia conocen corazón creer debe derecho derosa desgracia discernir divino doctor doctor González dolores elevado encantos energías engrandece entusiasmo espíritu estudio eterno fecunda felicidad filosofía flores Foción fuerza fulguraciones generaciones genio gloria grandeza greso hermosa historia hogar humanidad ideal ideas ilustrado imperio indecibles inmortal inspirada inteligencia justicia juventud juzga lábaro libertad llegar llena lucha magnífico Malesherbes marcha mente miento mirar moral mundo Nación naturaleza necesario nobles odio ONAN palabra pasiones Patria patriotismo pensador pensamien pensamiento pluma poder poder judicial porvenir principios profundo progreso propia pública pueblos Rabelais razón República revela sacerdote sangre siones social sublime surge terrífica tesoros tismo trabajo triste triunfos tros venezolano Venezuela verdad virtud vive Voltaire
Pasajes populares
Página 79 - Sancho le dijo : la libertad , Sancho , es uno de los mas preciosos dones que á los hombres dieron los cielos : con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra , ni el mar encubre : por la libertad , asi como por la honra, se puede y debe aventurar la vida ; y por el contrario , el cautiverio es el mayor mal que puede venir á los hombres.
Página 9 - ... existe ha de consumirse en el incendio para pagar el bien de ser libres, y por utilizar la riqueza que la tiranía devora en defenderse y perpetuar el crimen. De nada sirven las cosechas opimas, los ganados lucios en las praderas, los cultivos multiplicados en las heredades, las telas como una primavera de lujo, el oro en las cajas de hierro, si este desgraciado corazón del hombre, si esta infeliz mente humana, imploran la misericordia del despotismo, en vez de hacer a la libertad, el holocausto...
Página 138 - Hay dos civilizaciones. Esta del pensamiento en que vive uno sumergido en la luz plena, y la otra del sentimiento que se resume en la gran patria llamada el hogar. Prefiero la última y lloro por su ausencia. Entre Santa Bárbara y París elijo mis montañas. Remonta el águila á la mayor altura y fijos sus ojos en el sol, como que bebe la gran luz que le circunda; mas aquella avecilla humilde que nunca abandona el patrio nido y pasa sus días á la vista del solar que la vió nacer, ésa es más...
Página 138 - Patria, mi lamilla, mis amigos, mi sol, la dulce habla de nuestra cuna, la tumba en que duermen nuestros padres, todo esto engendra la nostalgia del espíritu, como si Dios hubiese querido grabar en el alma del hombre la adorada imájen de la Patria, al modo que su propio santo nombre en el luminoso firmamento, con soles infinitos y claridad de inextinguible memoria.
Página 9 - En verdad no se ha de escanciar esta licor precioso, como el vino en los festines; no bajará del cadalso a perturbar con su torrente los campos de la filosofía y de la piedad; el hermano no abrirá las venas del hermano. Es sagrada la sangre; pero como lo son todas las cosas de la naturaleza, por el tiempo en que no sea preciso tocarlas ... La libertad está sobre todo; dentro de ella el honor de las naciones y de los partidos, y ya entonces la sangre es una contingencia, no verterla una debilidad,...
Página 138 - ... feliz. Curarigua de Leal, Santa Bárbara, la Patria, mi familia, mis amigos, mi sol, la dulce habla de nuestra cuna, la tumba en que duermen nuestros padres, todo esto engendra la nostalgia del espíritu, como si Dios hubiese querido grabar en el alma del hombre la adorada imagen de la Patria, al modo que su propio nombre en el luminoso firmamento con soles infinitos y claridad de inextinguible memoria».
Página 16 - Sobre la roca solitaria de los mares pasa la furia de los vientos desencadenados, y las olas la flagelan con su azote, cuyas espumas escalan el espacio y se difunden en los plomizos nubarrones que se desgajan del cielo, preñado de tinieblas... hasta que la ira de los...
Página 178 - Las costumbres domésticas deciden finalmente de las costumbres públicas , y solo por el ejercicio de aquellas , el pueblo se prepara á la práctica de las virtudes públicas. Y el hombre sin costumbres...
Página 178 - Los hombres sin virtud, y acostumbrados á obedecer á sus pasiones en el centro de sus familias, siguiéndose unos á otros en el extravío del ordinario curso de la vida ¿tomarán repentinamente nuevo genio y...
Página 47 - Mi juventud, mi vida de soldado y mi escasa ilustración, me hacen insuficiente para resolver con madurez graves cuestiones de política, me impiden seriamente fijar como legislador los destinos de mi patria».