Galateo español: Affadido el Destierro de ignorancia ...J.F. Piferrer, impresor de S.M., 1796 - 305 páginas |
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... llevar tanto de su pensamiento , que sin mirar lo que hacen , están puestos los ojos en otro , riendose de lo que están imaginan- sin acordarse de aquel á quien mi- . ran , y alli es cierta la sospecha , como dice un Autor . do , Si ...
... llevar tanto de su pensamiento , que sin mirar lo que hacen , están puestos los ojos en otro , riendose de lo que están imaginan- sin acordarse de aquel á quien mi- . ran , y alli es cierta la sospecha , como dice un Autor . do , Si ...
Página 94
... llevar tanto dulce de amor y amistad que se haga sin daño de barras , de suerte , que el trato que se dá á qual- quiera sea de poco momento , y que sin vergüenza lo pueda escuchar á quien se dá ; y asi , aunque estas befas , y dichos es ...
... llevar tanto dulce de amor y amistad que se haga sin daño de barras , de suerte , que el trato que se dá á qual- quiera sea de poco momento , y que sin vergüenza lo pueda escuchar á quien se dá ; y asi , aunque estas befas , y dichos es ...
Página 125
... llevar todos los cofres , se fueron á descansar á su casa , adonde á sola su muger , y dos hijas que tenia , se dió parte del gozo tan grande y bien se cree quál seria , pues por la pérdida de su Principe an- daban todos en aquel Reyno ...
... llevar todos los cofres , se fueron á descansar á su casa , adonde á sola su muger , y dos hijas que tenia , se dió parte del gozo tan grande y bien se cree quál seria , pues por la pérdida de su Principe an- daban todos en aquel Reyno ...
Página 171
... llevar las manos colga- das , ni echar los brazos , que parezca que vá sembrando con ellos . Hay algunos que quando andan alzan los pies como caballos que se espantan , y echan las piernas ácia fuera , como si las sacasen de alguna arca ...
... llevar las manos colga- das , ni echar los brazos , que parezca que vá sembrando con ellos . Hay algunos que quando andan alzan los pies como caballos que se espantan , y echan las piernas ácia fuera , como si las sacasen de alguna arca ...
Página 203
... llevar hue- vos en saco , de esconderse el fuego en el seno , de dár la teta á la culebra , y de hacer bien á bellacos . Guerra . Por quatro cosas se permite hacer guerra con razon : Por la Fé , por la jus- ticia , por mantener la paz ...
... llevar hue- vos en saco , de esconderse el fuego en el seno , de dár la teta á la culebra , y de hacer bien á bellacos . Guerra . Por quatro cosas se permite hacer guerra con razon : Por la Fé , por la jus- ticia , por mantener la paz ...
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Términos y frases comunes
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Pasajes populares
Página 6 - Y como me viese de buen ingenio, holgábase mucho y decía: —Yo oro ni plata no te lo puedo dar; mas avisos para vivir muchos te mostraré.
Página 2 - Mi viuda madre, como sin marido y sin abrigo se viese, determinó arrimarse a los buenos por ser uno dellos...
Página 17 - Era la risa de todos tan grande, que toda la gente que por la calle pasaba entraba a ver la fiesta; mas con tanta gracia y donaire contaba el ciego mis hazañas, que, aunque yo estaba tan maltratado y llorando, me parecía que hacía sinjusticia en no se las reír.
Página 54 - Este — decía yo — es pobre y nadie da lo que no tiene; mas el avariento ciego y el malaventurado mezquino clérigo, que, con dárselo Dios a ambos, al uno de mano besada y al otro de lengua suelta, me mataban de hambre, aquéllos es justo desamar y aqueste de haber mancilla.
Página 23 - Aquélla le cocía y comía los ojos y la lengua y el cogote y sesos y la carne que en las quijadas tenía, y dábame todos los huesos roídos. Y dábamelos en el plato, diciendo: — Toma, come, triunfa, que para ti es el mundo. Mejor vida tienes que el Papa.
Página 51 - ... Ahora, pues, come, pecador; que, si a Dios place, presto nos veremos sin necesidad. Aunque te digo que, después que en esta casa entré, nunca bien me ha ido. Debe ser de mal suelo; que hay casas desdichadas y de mal pie, que a los que viven en ellas pegan la desdicha. Esta debe de ser, sin duda, de ellas; mas yo te prometo, acabado el mes, no quede en ella, aunque me la den por mía.
Página 20 - Aun apenas lo había acabado de decir cuando se abalanza el pobre ciego como cabrón, y de toda su fuerza arremete, tomando un paso atrás de la corrida para hacer mayor salto, y da con la cabeza en el poste, que sonó tan recio como si diera con una gran calabaza, y cayó luego para .atrás medio muerto y hendida la cabeza.
Página 41 - Después desto, consideraba aquel tener cerrada la puerta con llave, ni sentir arriba ni abajo pasos de viva persona por la casa. Todo lo que yo había visto eran paredes, sin ver en ella silleta, ni tajo, ni banco, ni mesa, ni aun tal arcaz como el de marras. Finalmente, ella parecía casa encantada. Estando así, díjome: —Tú, mozo, ¿has comido?
Página 63 - Pues, estando en esto, entró por la puerta un hombre y una vieja. El hombre le pide el alquiler de la casa y la vieja el de la cama.
Página 54 - ... no me mantuviese, mas a quien yo había de mantener. Con todo, le quería bien, con ver que no tenía ni podía más. Y antes le había lástima que enemistad. Y muchas veces, por llevar a la posada con que él lo pasase, yo lo pasaba mal. Porque una mañana, levantándose el triste en camisa, subió a lo alto de la casa...