festado en los datos acabados de citar revelan elocuenter. te el rápido desarrollo del gigantesco imperio en el que, pesar del nihilismo y de los cuidados de la paz exterior, aprovecha el tiempo la autocracia en organizar el país y prepa. rar el porvenir por medio de la difusión de la instrucción pública, primera condición para transformar un imperio semibárbaro en pueblo civilizado, y un estado pobre en nación rica é ilustrada. Dejamos á otros la tarea de apreciar el alcance que para la tranquilidad ó la guerra europea podrá tener el fallecimiento de Alejandro III; dejamos á los políticos aquilatar los aciertos ó los errores internacionales del emperador difunto; á sus biógrafos el examen de las cualidades de su corazón é inteligencia; á los franceses ensalzar la lealtad de su carácter; á los alemanes lamentarse de su antipatía contra Prusia; á los ingleses hacerle imparcial justicia y preparar con Nicolás II el cambio del acuerdo franco-ruso en acuerdo rusoanglo, y á sus hijos, finalmente, llorar la pérdida de tan honrado padre de familia, postrados ante sus inanimados restos en el soberbio panteón de San Pedro y San Pablo, mientras el pueblo ávido de emociones y lleno de esperanzas contempla recogido el fúnebre convoy que transporta á la última morada el cadáver del emperador muerto, y saluda el advenimiento del nuevo Czar con la curiosidad y el entusiasmo de todo reinado nuevo. Para nosotros el imperio de Alejandro III ha sido un glorioso paréntesis entre la Rusia antigua y la moderna, paréntesis breve, consagrado al trabajo de acrecentar las fuerzas materiales é intelectuales del país, dispuesto á lanzarse con mayores brios y por nuevos caminos en las luchas de la civilización y del progreso. El nihilismo y Polonia, los dos grandes peligros de la autocracia, pueden debilitar la marcha de esta última, pero son impotentes para impedirla su providencial misión de disciplinar los pueblos asiáticos convirtiéndolos al cristianismo, y poner á los eslavos rusos en condiciones de disputar á germanos, latinos y anglo-sajones la hegemonía europea. Próximo ó lejano ese día, la conducta del nuevo Czar, afecto, según cuentan, á las instituciones inglesas, está trazada desde luego. Consiste en sacar las naturales consecuencias del reinado de sus dos predecesores, y coronar la obra de ambos con el planteamiento de un régimen liberal en la Rusia europea, sin abandonar el sistema de equilibrio internacional seguido por su padre, educado para la guerra, y bastante humano y cristiano, á pesar de esto, para no sacrificar en sus aras la sangre de sus súbditos y la necesaria paz del mundo. A. S. DOCTOR DEL BONALD GORGUERA, 17, MADRID Pastillas cloro-boro-sódicas con cocaina. Especiales contra las irritaciones agudas y crónicas de las Pastillas de frutos pectorales con codeina. De seguro éxito en todas las enfermedades de las vías res- Pastillas vermifugas de Bonald. Medicamento utilísimo, principalmente para los niños, y Vino de coca, quina y hierro peptonizado. Contra la anemia, clorósis, inapetencia, neuralgias inter- Vino de coca y hierro peptonizado. Contra los afectos nerviosos con debilidad, digestiones Vino alimenticio preparado con peptona, coca, quina y cacao. Elixir de pepsina, pancreatina y diastasa á la cocaina. Empléase con seguro resultado en las más complejas perturbaciones de la digestión, vómitos glerosos ó ácidos, digestiones lentisimas, dolores de estómago y neuralgias armónicas con la digestión. Precio del frasco. Pesetas. 2 1,25 4 4 4 4 ADVERTENCIAS. Tanto los medicamentos anunciados como otros del doctor Bonald, están acreditados en la práctica por reputadas autoridades en las ciencias médicas. A cada frasco ó caja acompaña un prospecto explicativo para el modo de usar el medicamento. Se expenden en casa del autor, Gorguera, 17, Madrid y en las principales farmacias. Se envían á provincias directamente. |