el Gobierno, como algunos han pensado, puede leerse la censura de la Real Sociedad Económica de Madrid, y la licencia de S. M. He leido detenidamente, por encargo de nuestra Real Sociedad, los quadernos que intenta imprimir D. Juan Sempere, en continuacion de la Biblioteca Económica, cuyos primeros números han visto ya la luz pública. La Sociedad debe estar bien penetrada de la utilidad y mérito de una obra, en que se analizan los trabajos de nuestros economistas; se copian los pasages mas interesantes; y se añaden sobre sus ideas y pensamientos observaciones juiciosas. Se propaga así el conocimiento general de los hombres zelosos, que en todo tiempo se dedicaron al cultivo de la ciencia política, y que trataron de mejorar la suerte de nuestra patria. Líbranse del olvido sus escritos preciosos; y la economía civil tiene una historia de sus progresos y vicisitudes, razonada, y filosofica C En En todas las ciencias seria de desear que se executase un plan semejante, cuyo desempeño sin duda daria mucha luz á los que entrasen á es tudiarlas; y seria una apreciable introduccion, que. les guiaria en sus tareas. Siendo esto así, la nacion, y muy particularmente nuestro cuerpo, deben agradecer mucho al Señor Sempere el que haya empezado á execu tarlo felizmente en la ciencia mas des cuidada, pero que mas inmediatamente influye en la prosperidad del Estado, y riqueza de sus individuos. En los números, cuya censura se me ha confiado, trata el autor de la vida literaria, y escritos económicos de D. Diego Saavedra Faxardo, D. Josef Pelliceride Ossau, D. Juan de Palafox, D. Guillen Barbon, y Castañeda, Francisco Martinez de la Mata, el Dr. Sancho de Moncada, el Licenciado Pedro Fernandez Navarrete, y el Licenciado Gerónimo Cevallos. La mayor parte son muy conocidos por qualquiera que ha hecho al BIBLIOTECA ESPAÑOLA ECONÓMICO-POLÍTICA POR D. JUAN SEMPERE Y GUARINOS, el Gobierno, como algunos han pensado, puede leerse la censura de la Real Sociedad Económica de Madrid, y la licencia de S. M. ་ He leído detenidamente, por encargo de nuestra Real Sociedad, los quadernos que intenta imprimir D. Juan Sempere, en continuacion de la Biblioteca Económica, cuyos primeros números han visto ya la luz pública. La Sociedad debe estar bien penetrada de la utilidad y mérito de una obra, en que se analizan los trabajos de nuestros economistas; se copian los pasages mas interesantes; y se añaden sobre sus ideas y pensamientos observaciones juiciosas. Se propaga así el conocimiento general de los hombres zelosos, que en todo tiempo se dedicaron al cultivo de la ciencia política, y que trataron de mejorar la suerte de nuestra patria. Líbranse del olvido sus escritos preciosos; y la economía civil tiene una historia de sus progresos y vicisitudes, razonada, y filosofica »En 1 |