DOÑA ISABEL SEGUNDA, por la gracia de Dios y de la que presentes vieren y entendieren, SABED: Que siendo nuestra voluntad у la de las Cortes del Reino regularizar y poner en consonancia con las necesidades actuales del Estado los antiguos fueros y libertades de estos Reinos, y la intervencion que sus Córtes han tenido en todos tiempos en los negocios graves de la Monarquía, modificando al efecto la Consti |