Credo — advierta vm la inocente malicia — , al tiempo de decir "padeció so el poder de Poncio Pilato", acordándome que no había de decir más Pilato, dije: "padeció so el poder de Poncio de Aguirre". Obras - Página 141por Francisco de Quevedo - 1791Vista completa - Acerca de este libro
| Francisco de Quevedo - 1911 - 316 páginas
...dóme desatacar, y azotándome, decía tras cada azote: "¿Diréis más Poncio Pilatos?" Yo respondía: "No, señor" ; y respondílo dos veces á otros tantos...tan escarmentado de decir Poncio Pilato, y con tal is miedo que, mandándome el día siguiente decir, como solía, las oraciones á los otros, llegando... | |
| Francisco de Quevedo - 1911 - 308 páginas
...mandome desatacar, y azotándome, decía tras cada azote: "¿Diréis más Poncio Pilatos?" Yo respondía: "No, señor" ; y respondílo dos veces á otros tantos azotes que me dio. Quedé tan escarmentado de decir Poncio Pilato, y con tal miedo que, mandándome el día siguiente... | |
| Federico Ruiz Morcuende - 1922 - 216 páginas
...tras cada azote: "¿Diréis más Pondo Pilato?" Yo respondía: "No, señor"; y respondílo dos veces a otros tantos azotes que me dió. Quedé tan escarmentado...Poncio Pilato, y con tal miedo que, mandándome el día siguiente decir, como solía, las oraciones a los otros, llegando al Credo — advierta vuestra... | |
| Evelyn Picon Garfield - 1991 - 364 páginas
...Yo 240 respondía: — «No, señor»; y respondílo veinte veces, a otros tantos azotes que me dio. Quedé tan escarmentado de decir Poncio Pilato, y con tal miedo, que, mandándome el día siguiente decir, como so- 245 lía, las oraciones a los otros, llegando al Credo — advierta... | |
| José Antonio Benito Lobo - 2000 - 302 páginas
...Pilato?". Yo respondía: -"No, señor": y respondílo veinte veces, a otros tantos azotes que me dio. Quedé tan escarmentado de decir Poncio Pilato, y con tal miedo, que, mandándome al día siguiente decir, como solía, las oraciones a los otros, llegando al credo -advierta v. m.... | |
| Elvira Collados - 1963 - 652 páginas
...Poncio Pilato?" Yo respondía: "No, señor"; y respondílo dos veces a otros tantos azotes que me dio. Quedé tan escarmentado de decir Poncio Pilato, y con tal miedo que, mandándome el día siguiente decir, como solía, las oraciones a los otros, llegando al Credo —advierta V. M. la... | |
| |